lunes, 19 de noviembre de 2012

Las Baterías en el Sibiyibi (I)



Desde que empecé el blog, me han escrito dos o tres amigos pidiéndome que cuente cómo resuelvo a nivel técnico la grabación de baterías, por si mi método les pudiera ser de utilidad a ellos en sus home-studios, así que sin tampoco sentar tesis sobre nada, sino con la única intención de relatar mi corta experiencia, voy a abordar el tema, intentando no ser excesivamente técnico y aburrido. 

Antes que nada diré que lo de las baterías era precisamente el primer obstáculo que se me presentó el día en que decidí reconvertir el Sibiyibi de cuarto de ensayo a home-studio.Tuve muy claro que con el espacio que contaba me iba a ser imposible grabar una batería acústica decentemente. Entre otras cosas porque iba a tener una única habitación -y con poca altura- para disponer todo el equipo que tenía, aparte de instrumentos, un par de sillas, … demasiados trastos... :-(


Así era el Sibiyibi como cuarto de ensayo, según lo terminé, en 2005:


Tenía batería acústica e iba estupendo para ensayar. La habitación sonaba muy bien, pero grabar es otro mundo, y hace falta más altura para poder grabar baterías cómodamente y con buen sonido. No es una tontería....para grabar baterías, el espacio y el acondicionamiento del mismo es importantísimo.

Más tarde, tanto el equipo como algunas otras cosas fueron cambiando. En 2007 ensayaba por la noche, así que para no molestar a la familia, montamos un sistema para ensyar por auriculares y una batería electrónica:



Ahora mismo, y desde hace unos meses, las cosas han cambiado porque hice una ampliación, con lo que dispongo de dos espacios separados y con distinto acondicionamiento, más altura... así que ya puedo grabar baterías “de verdad”. Ya lo contaré más adelante.

Empecemos por el principio, entonces…

La solución más sencilla, rápida y económica para resolver las baterías en el entorno de un estudio doméstico pasa por tener un teclado midi y un software que permita por medio del teclado, “disparar” muestras –samples- de sonidos reales de batería. Hoy en día hay como una docena de softwares para elegir, dependiendo tanto lo “real” y complejo que queramos que suene lo que grabamos, o lo sencillo que queramos hacerlo.

Nuestra elección de un software u otro repercutirá principalmente en dos cosas: utilización o no, de muchos recursos a nivel de CPU de nuestro ordenador, y tiempo en conseguir “dar forma” al sonido de batería que estemos buscando, atendiendo a que los programas más complejos tienen infinidad de parámetros que podemos ajustar tanto pre como post grabación.

Que quede claro que  en el momento de interpretar la batería tocando un teclado, muy poco importa –salvo para nuestra escucha en ese momento- el que estemos usando el software más sencillo o el más complejo, ya que lo que estaremos grabando realmente son únicamente los impulsos midi desde el teclado.

En nuestro secuenciador estamos solamente grabando las órdenes o golpes de bombo, caja, etc… y aunque estemos usando el software más sencillo del mercado, podemos después de grabar, adjudicar esas órdenes a que suenen con el tipo de bombo, de caja, o de platos que queramos… incluso la misma pista midi que hemos grabado, puede luego mover un software u otro, en el caso de que tengamos dos o más softwares de baterías instalados en nuestro sistema.

…aparte de los softwares cada vez más completos para baterías, hay más de un centenar de drum kits: colecciones de muestras –samples- de  sonidos de los más variados estilos, para contar con una paleta realmente interminable y totalmente personalizable mediante edición…así que se puede contar sin ningún problema con un disco duro de la capacidad que uno quiera, donde tener almacenadas muestras de baterías que vayan desde estilos jazzísticos hasta nu-metal…si es que necesitas de todo eso. (!!!)

En mi caso, la elección de un software fue bastante sencilla: uno que sonara bien y que fuera bastante editable sin tener para ello que emplear mucho tiempo en personalizar cada sonido, de manera que la batería la resolviera lo más rápido posible.

Nunca he tocado la batería y la verdad, es que tampoco tengo ganas de aprender a hacerlo, de ahí precisamente que haya cometido tantos errores sobre todo en las primeras cosas que grabé en el Sibiyibi. Descuidos, prisas, decenas de cosas que no ves a simple vista en estos softwares y en el propio secuenciador, como la utilización de cierta memoria como buffer,  han hecho que algunas canciones que he grabado,  a toda prisa como siempre, hayan quedado con evidentes tirones de tempo y pistas que no “casan” unas con otras…

En fin…menos mal que mi tozudez ha podido más que el desánimo y hoy sigo aquí, queriendo aprender a hacer las cosas mejor, y también contando mis errores para que puedan ayudar a otro a no cometerlos.

De los programas para baterías que he utilizado y me parecen las mejores opciones, destacaría en orden de más sencillo a más complejo: EZ Drummer, Battery y BFD.

EZ Drummer suena muy bien y es muy rápido trabajar con él. Los kits del propio fabricante son sencillos de utilizar, y me gusta muchísimo el kit denominado “Nashville”. Es un software que consume muy poca CPU y puedes moverlo bien con casi cualquier ordenador actual.

BFD es el más completo y complejo que conozco. Tiene una librería que llega hasta más de 50 GB de muestras increíblemente grabadas, ordenadas hasta por marcas de batería, con lo que si tienes claro que buscas sonar como una Ludwig de tal modelo o una Pearl de tal otro, lo tienes más claro….eso sí, con MUCHA diferencia es el programa de baterías más difícil de configurar que conozco y consume una barbaridad de CPU, con lo que vas a necesitar una máquina bastante potente para moverlo. No lo recomiendo a quien quiera ir con “soltura” ;-)

De cualquier manera, para casi cualquier cosa que quieras hacer utilizando samples de audio, ya sea batería, pianos o cualquier otros instrumento virtual, lo mejor que puedes hacer es tener un disco duro aparte sólo para mover dese allí las muestras. Lo ideal sería tener por lo menos TRES discos duros: Uno para el sistema operativo, secuenciador y demás, otro para guardar las sesiones de trabajo y un tercero para almacenar y mover desde allí las muestras o samples que van a utilizar los instrumentos virtuales que utilices.

Battery es programa que más me gustó y el que terminé utilizando. Lo que más me gusta de él es, aparte de su sencillo uso, que es capaz de funcionar con muestras que pueden ser cualquier archivo WAV, con lo que no sólo nos puede servir para las baterías, sino que es un sampler en toda regla, con el que poder disparar cualquier sonido desde el teclado o cualquier otro controlador midi que tengamos... sólo tenemos que adjudicar el sonido que queremos disparar a cualquier tecla de nuestro teclado midi.

Battery3: captura de pantalla de uno de mis bancos de baterías con sonido "clásico".

Bueno...ya tenía un teclado midi, un software de batería, y unos sonidos al menos "satisfactorios" para empezar...lo que no tenía era ni idea de cómo tocar la batería :-DDD
Así que si con una batería no era capaz de tocar cuatro compases, pues con el teclado midi se me hizo realmente imposible. Tocando la batería con el teclado soy más malo que el peor de los baterías!!

Todo depende de lo que uno quiera hacer...para hacer música electrónica o para cosas en las que hay un patrón sencillo que se repite y tal...pues toca uno dos o tres compases,...hace copy>paste, hace una pequeña variación, suma un redoble un par de platos...vamos..que puede quedar entre aparente y hasta estupendo, pero yo andaba buscando otra cosa...

Yo quería un sonido y una factura de batería lo más real posible, y ya que no podía grabar una batería acústica, pues la solución del teclado, que en un principio me parecía la más sencilla, pues no era la más efectiva. :-(

Tras varios intentos, me di cuenta de que me iba a ver el resto de mi vida intentando que "aquello" que grababa con el teclado, pareciera un tío tocando la batería, y eso era imposible, ... al menos con mi escasa destreza.

Así que me hice con una de estas:

Batería midi de gama económica


Así tenía una batería que no tenía que microfonear y que por medio de midi, me permitía disparar los sonidos que le adjudicaba con Battery. La solución era estupendas en principio, y dedicándole tiempo y con algo de experiencia, se pueden conseguir resultados totalmente válidos e incluso de lo más eficiente para quien no quiera, a la hora de grabar baterías, quebraderos de cabeza con cables, micros, previos, acondicionamiento acústico... 

Ahora que tenía instrumento me faltaba instrumentista, porque yo ni de broma soy capaz de hacer pum pah pum pah tres veces seguidas golpeando en el mismo sitio...

El primer batería en aparecer por el Sibiyibi fue Pedro Gómez.... 

Aún antes de estar terminada de pintar la habitación, ya montamos una batería y vino Pedro a probar la acústica del sitio.


Pedro Gómez  en el Sibiyibi. 2004. Foto: RH


El currículum de Pedro Gómez  tocando la batería con grupos canarios es tan amplio, que me llevaría tres párrafos tan sólo enumerar las bandas con las que ha tocado desde los primeros años 80... Moral Femenina, Afrika Gráfika, Separados Fieles...

Nos conocimos a mediados de los 80, cuando ambos estudiábamos Bellas Artes en la Universidad de La Laguna, y hemos tocado muchas veces juntos. Un par de años al final de la existencia de Moral Femenina en 1995, y tres años más con Jose Mesa y Los Presentes. 


Pedro Gómez en el Teatro Leal, tocando con Sito Morales Group. Foto: Archivo Teatro Leal


Así que Pedro Gómez fue la primera persona con la que conté a la hora de grabar una canción con batería en el Sibiyibi.

Era la primera vez que Pedro tocaba una batería electrónica. El tacto de sus elementos de goma es muy diferente del de los parches de una batería acústica. La verdad es que coarta mucho la forma de tocar de un batería acostumbrado más a los los matices que a "dar porrazos". 

Hay baterías electrónicas de mucha más calidad que la que yo tenía, con parches "de malla" que se parecen más al tacto y rebote de unos parches de batería tradicional, pero los precios de estas se van a un nivel que no podría permitirme, por no decir que de contar con tal presupuesto, preferiría comprar una batería acústica de gama media.

Tras varias pruebas con Pedro, ajustando la batería y el software, personalizando un banco de sonidos para la canción que quería grabar, optamos por combinar la batería electrónica con una caja de batería acústica de verdad. Pedro se trajo una caja Tama , un soporte y unas escobillas. Tocando con escobillas es literalmente IMPOSIBLE hacer matices en una batería con los elementos de goma. Para hacernos una idea,...sería como tocar sobre una alfombrilla de ratón de ordenador. Nada más diferente a lo que necesitábamos.

Se trataba de una canción muy sencilla en la que la batería utiliza tan solo bombo, caja y hihat.


La caja la grabamos con dos micrófonos: un shure SM57 apuntando al centro del parche, dispuesto a unos 15 cms, y un micro de condensador Behringer B2 por debajo...recogiendo la bordonera.

No es que sea el método más ortodoxo para grabar una caja, pero al tratarse de una canción interpretada con escobillas, me interesaba acentuar el sonido de la bordonera...

En aquella ocasión sólo tenía un previo de válvulas TLAudio. Un channel strip como este, con ecualización y compresión:







 Así que el B2 iba por ahí y el SM57 iba por uno de los previos de la Digi003. Bombo y hihat mueven unos wavs de la librería propia de Battery, que ecualizamos y modificamos un poco en respuesta, para buscar que se adecuaran más al sonido que andábamos buscando:  lo más  tradicional posible.



Juanjo Jorganes, unos días depsués, tocó el bajo eléctrico: un Fender Precission grabado por línea, y el teclado, que es el elemento que realmente "conduce" la canción. Un Fender Rhodes que en este caso es un  instrumento virtual reamplificado... ya contaré otro día como hago reamp...

La guitarra acústica es una Alhambra J3, una Jumbo con tapa de cedro macizo sin cutaway, grabada en stéreo, también con el B2 y el SM57, que en aquel momento eran mis dos únicos micrófonos.

La guitarra de 12 cuerdas del arreglo, es una Danelectro DC59 grabada por línea a través de una caja de inyección pasiva Palmer.

El solo con el Ebow, es una Rickenbacker 360 grabada microfoneando con el Sm57 un ampli de válvulas Bedrock BC50.

La voz está grabada con un micro Neumann U87 prestado. 

Es el micro más caro que ha entrado en el Sibiyibi, aunque no por ello me parece el mejor ni el más adecuado para un estudio doméstico,... sobre todo cuando con lo que cuesta, puede uno comprarse una docena de micros diversos, con los que aprender y poner en práctica muchas perrerías que no haría con un micro de 2500 €.

Creo que la canción no quedó del todo mal en su día, pero ahora que tengo un poco más de experiencia la he vuelto a mezclar y masterizar, y creo que me gusta más que la versión que publiqué en el primer Ep que hice en el Sibiyibi: RH3: "RH & The Cassavetes: Hometaping" y que puedes escuchar y descargar entero desde mi web


Aquí tienes la canción en una mezcla de hace unos días. 
The House of John:








Puedes descargarla si quieres. 

Lo que menos me gusta es la voz, como casi siempre... pero es que a diferencia de las guitarras o los bancos de sonido de batería, voz no tengo otra... :-(


Para no aburrir extendiéndome demasiado a los lectores que no les interesa mucho las cuestiones técnicas, volveré sobre el tema en otra ocasión y contaré como dejé de lado los softwares y samples de batería,  la bicicleta estática ( yo llamo así a las baterías electrónicas ;-) ) y terminé  por hacerme con un set de micros decente, y contando con la ayuda de otro amigo y baterista también, preparamos un espacio donde poder grabar baterías DE VERDAD con una batería acústica. 

Otra cosa más que estaré siempre aprendiendo.


...Y hasta aquí esta primera entrada sobre cómo soluciono las baterías en el Sibiyibi.


En breve vuelvo y te lo cuento...